Amistad

Amistad

El año pasado le envié un mensaje a una persona para el día de la amistad y en su respuesta solamente me dijo “Yo no celebro ese día”. Y yo me pregunto: “Entonces ¿cuándo vamos a celebrar ese importante día? Cada día les mostramos a nuestras amistades afecto y cariño, por tanto, no tenemos que esperar el día de la amistad para demostrar nuestro afecto hacia ellos. La sociedad está regida por un orden y bajo ese orden escogieron el día de la amistad por razones que no voy a enfatizar ahora, porque sería otro tema.
Lo cierto es que, en la vida puedes acabar diciendo adiós a un sin número de gente, pero siempre encontrarás un amigo o una amiga que por más fuertes que sean los vientos, siempre ha estado ahí para apoyarte. A la verdad que un buen un amigo, una buena amiga es difícil de encontrar, pero los hay.

Una amistad genuina conoce la palabra perdón y no conoce la palabra celos ni envidia. Una buena amiga o un buen amigo, se goza con tus éxitos. Una amistad genuina sabe perdonar las faltas y las ofensas sin guardar resentimiento. Una amistad verdadera, es aquella que ofrece todo sin esperar nada a cambio.
Una amistad fructífera se conoce por los frutos que ha cosechado.
La amistad es un regalo que Dios nos ha dado. Él nos regala a personas conocidas y desconocidas que serán nuestros amigos.

La amistad es dinámica debido a que sin darnos cuenta nos ganamos a un amigo o una amiga, ya sea en el salón de belleza, en el supermercado, en la universidad; en la iglesia o en la infancia de nuestra vecindad.
Todas estas personas hermosas que nos regalaron una sonrisa, se pueden convertir en amigos temporales, como también amigos para toda la vida. Quizás ha escuchado la frase “usted se puede postular para la presidencia porque tiene muchos amigos”. No podemos confundir la palabra conocidos y amigos. Conocemos a muchas gentes amables, pero no todas son amistades. Jesús nos ha ofrecido su amistad desde el principio y cuando creemos en Dios y en Su Palabra nos convertimos hijos y amigos de Dios.

“Abraham creyó a Dios, y le fue contado por justicia, y fue llamado amigo de Dios.” Santiago 2:23

Salmo 25:15 “El Señor brinda su amistad a quienes le honran, y les da a conocer su pacto.”

Pidámosle a Dios sabiduría para saber escoger a nuestras amistades y dejar que el tiempo vaya formando ese crecimiento de amistad. Conservemos como un jardín de rosas hermosas, aquellas amistades que por años nos han brindado su apoyo, amor y cariño sin nada a cambio. Que el amor se mantenga vivo y no se enfríe.

Dice la Palabra de Dios en Mateo 24:12- que “por haberse multiplicado la maldad, el amor de muchos se enfriará.

No dejemos enfriar la amistad. Este es el tiempo para decir perdón y demostrar nuestro afecto y cariños a nuestras amistades. Pidámosle cada día a Dios por nuestros amigos y bendecir sus vidas y las de sus familias. A todas mis amistades que Dios ha puesto en mi camino, les deseo salud, gozo y paz. Que sus metas sean cumplidas y que sus hijos y sus casas siempre reine el amor de Dios en sus vidas. Feliz día de la amistad.

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