Dios de Esperanza
Dios nunca dejó a los israelitas desamparados cuando les tocó andar por el desierto. En tierra árida y desolada Dios estuvo con ellos, caminó con ellos y nadie se enfermó. Dios andaba con ellos de día como columna de nube y de noche como columna de fuego. La presencia del Señor estaba con ellos tal como se lo prometió a Moisés diciendo: “Mi Presencia irá contigo, y te daré descanso” (Éxodo 33:14). Dios es el mismo de ayer, de hoy y para siempre, Él brinda descanso y esperanza para que te levante y confié en Él. Si piensas que estás solo, vengo a decirte que tú no estás solo, Dios camina contigo.
Hoy Jesucristo te reviste con vestidos nuevos de esperanza, Él te brinda descanso porque te ama y desea caminar contigo. Los israelitas pasaron por situaciones difíciles, pero a todas ellas, Dios estuvo con ellos para librarlos del peligro y del mal. En la vida vamos a pasar por situaciones inquietantes y angustiosas, pero hoy te traigo Palabras de Dios para cuando te sientas angustiado: ¿Por qué voy a inquietarme? ¿Por qué me voy a angustiar? En Dios pondré mi esperanza, y todavía lo alabaré. ¡Él es mi Salvador y mi Dios! (Salmos 42:11)
¿Te ha sentido cansado y sin fuerzas y sin deseos de continuar? Agárrate y confía en Dios, Él nunca te pondrá cargas que tú no puedas cargar y cuando es demasiado pesada, te la quita. Dios nos hace un amoroso llamado, porque Él es todo amor. Él nos dice en Mateo 11:28 diciendo: “Vengan a Mí todos ustedes que están cansados y agobiados, y Yo les daré descanso”. “Pero los que confían en el Señor renovarán sus fuerzas; volarán como las águilas: correrán y no se fatigarán, caminarán y no se cansarán. Isaías 40:31
Dios tienen cuidado de cada uno de nosotros porque nos ama. Confiemos en el Señor nuestro Dios cada día porque Él es nuestra esperanza. “Y esta esperanza no nos defrauda, porque Dios ha derramado su amor en nuestro corazón por el Espíritu Santo que nos ha dado” (Romanos 5:5). Dios es un Dios misericordioso, Su misericordia es para siempre. ¡Alabado sea Dios, Padre de nuestro Señor Jesucristo! Por su gran misericordia, nos ha hecho nacer de nuevo mediante la resurrección de Jesucristo, para que tengamos una esperanza viva” (1 Pedro 1:3).
Jesús le dijo: Yo Soy el Camino, y la Verdad, y la Vida; nadie viene al Padre, sino por Mí” (Juan 14:6). Padre Eterno en este día he puesto mi esperanza en Tí. En este día y siempre, estoy alineado a Tu voluntad. Amén.
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