Cantad alegres a Dios, habitantes de toda la tierra. Servid a Jehová con alegría; venid ante Su presencia con regocijo. Reconoced que Jehová es Dios; Él nos hizo, y no nosotros a nosotros mismos; pueblo Suyo somos, y ovejas de Su prado. Entrad por Sus puertas con acción de gracias, por Sus atrios con alabanza; alabadle, bendecid Su nombre. Porque Jehová es bueno; para siempre es su misericordia, y Su verdad por todas las generaciones.
“On your walls, O Jerusalem, I have appointed watchmen; all day and all night they will never keep silent. You, who remind the Lord, take no rest for yourselves; and give Him no rest until He establishes and makes Jerusalem a praise in the earth.” (Isa. 62:6-7)