No te Canses de Hacer el Bien

No te Canses de Hacer el Bien
Dios Misericordioso
Mateo 25:35-40

Porque tuve hambre, y me disteis de comer; tuve sed, y me disteis de beber; fui forastero, y me recogisteis; estuve desnudo, y me cubristeis; enfermo, y me visitasteis; en la cárcel, y vinisteis a mí. Entonces los justos le responderán diciendo: Señor, ¿cuándo te vimos hambriento, y te sustentamos, o sediento, y te dimos de beber? ¿Y cuándo te vimos forastero, y te recogimos, o desnudo, y te cubrimos? ¿O cuándo te vimos enfermo, o en la cárcel, y vinimos a ti? Y respondiendo el Rey, les dirá: De cierto os digo que en cuanto lo hicisteis a uno de estos Mis hermanos más pequeños, a Mí lo hicisteis. Mateo 25:35-40

La misericordia de Dios no tiene límites y Él no hace acepción de persona. La Omnisciencia de Dios significa que Él lo ve todo y lo sabe todo. Cada vez que usted se acuerda de los desvalidos y le extiende la mano, Dios lo ve y se lo recompensará. Bendecir a otras personas tiene su galardón ante el Trono de Dios, las obras no salvan, pero le agradan a Dios. Dios es misericordioso y el ejemplo que Jesús nos enseña en Mateo 25:35-40, cada uno de nosotros lo podemos ofrecer para todo aquel que lo necesita. “No nos cansemos, pues, de hacer bien; porque a su tiempo segaremos, si no desmayamos. Así que, según tengamos oportunidad, hagamos bien a todos, y mayormente a los de la familia de la fe” (Gálatas 6:9-10). No te canses de hacer el bien.

Mensaje de Dios
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