El anillo representaba el sello de Dios. El sello de Dios significa la promesa de la protección divina de Dios en la tierra. El sello representa la firma de Dios y Él se lo otorga a quienes les son fieles. El sello significa que les pertenecemos a Dios. El sello de Dios representa posición, autoridad, valor y favor.
La Palabra de Dios nos dice en Génesis 41:42 que Dios bendijo a José el hijo de Jacob en Egipto diciéndonos que “… Faraón se quitó el anillo de sellar de su mano y lo puso en la mano de José; y lo vistió con vestiduras de lino fino y puso un collar de oro en su cuello”. También vemos cuando “el hijo pródigo regresó a su casa, su padre lo perdonó y mandó que se le colocase un anillo en la mano” (Lucas 15:22).
El anillo va acompañado con el sello y representa misericordia, redención, favor y posición a nuevas oportunidades. El sello de Dios es como un sello de una carta. Cuando vamos a enviar una carta, en la oficina de correo requiere que la carta esté sellada para poder tener valor en el envío, de lo contrario, nunca podrá enviarse a su destino. El sello de Dios siempre nos llevará a nuestro destino y a puertos seguros. Somos hijos de Dios y sellados por Su gracia y Su favor.
En aquel día, dice Jehová de los ejércitos, te tomaré, oh Zorobabel hijo de Salatiel, siervo mío, dice Jehová, y te pondré como anillo de sellar; porque Yo te escogí, dice Jehová de los Ejércitos” (Hageo 2:23 (RVR1960).
Palabra de Dios
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