El tema de la fe se encuentra bien detallado y con muchos ejemplos en la Biblia para que todos podamos entenderla paso a paso. Desde el Libro de Genesis hasta el Libro de Apocalipsis, vamos a ver ejemplos de fe para todos. Es necesario que podamos entender acerca de la fe para poderla aplicar en nuestras vidas; y vivir una vida agradable a Dios, porque “sin fe es imposible agradar a Dios” (Hebreos 11:6-8). El mismo Libro de Hebreos nos brinda la definición de la fe diciendo: “Es, pues, la fe la certeza de lo que se espera, la convicción de lo que no se ve” (Hebreos 11:1). También, Romanos nos dice, “Así que la fe es por el oír, y el oír, por la Palabra de Dios” (Romanos 10:17). De modo que, cada vez que nos adentramos a escudriñar, meditar, leer; y escuchar la Palabra de Dios, esta no retorna vacía, se queda en el corazón. De manera que la Palabra de Dios hace habitación en nuestras vidas de tal modo que, podemos llamarles a las cosas que no se ven como si estuviesen.
No está mal que nosotros les pidamos a Dios que nos otorgue fe o que nos la aumente, también “los apóstoles al Señor le dijeron a Él: “Auméntanos la fe”. Entonces el Señor dijo: Si tuvierais fe como un grano de mostaza, podríais decir a este sicómoro: Desarráigate, y plántate en el mar; y os obedecería. A medidas que vamos creciendo en los caminos del Señor, y aprendiendo de Su Palabra, nuestra fe aumenta. Dios nos otorga la fe cuando se la pedimos, Él nos ayudará a crecer como lo hizo con Su siervo Abrahán.
La fe de Abraham fue tan grande que siendo un hombre entrado en una edad muy avanzada creyó en lo que Dios le dijo: “…Mira ahora los cielos, y cuenta las estrellas, si las puedes contar. Y le dijo: Así será tu descendencia”. (Génesis 15:5, RV60). Abraham fue llamado el Padre de la fe y a través de él fueron bendita todas las naciones del mundo. Lo que más toca el corazón de Dios es ver a una persona que sin ver lo prometido pueda creer lo que se le ha prometido. Abraham creyó en la Palabra que Dios le había dado aun cuando esas palabras no encajaban en su realidad como hombre para procrear hijos en su edad avanzada. Las palabras de Dios para Abraham no solamente fueron para él sino también para su esposa Sara. Dios le había prometido darle un hijo a Sara aun en edad avanzada, siendo Dios fiel a Su promesa, le concedió el hijo que iba hacer su heredero. La fe de Abraham y Sara fue probada por medio de la promesa que Dios les había dado sin cuestionar sus circunstancias o su razonamiento. En ninguna circunstancia Abraham dudó de las promesas del Señor. Fe es no dudar acerca de lo que Dios promete a nosotros, es creer que, lo que Él promete Él lo cumple.
Dichosos Los Que No Vieron Y Sin Embargo Creyeron. Si usted le cree a Dios y a Su Palabra y vive una vida agradable a Él por medio de la fe, Siéntase dichoso.
Mensaje de Dios Escrito por Bv Flores www.ministeriosdesanidad.com
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