Pero si andamos en luz, como Él está en luz, tenemos comunión unos con otros, y la sangre de Jesucristo Su Hijo nos limpia de todo pecado.
Si decimos que no tenemos pecado, nos engañamos a nosotros mismos, y la verdad no está en nosotros.
Si confesamos nuestros pecados, Él es Fiel y Justo para perdonar nuestros pecados, y limpiarnos de toda maldad.(1 Juan 1:7-9 RV60)
Dios es Padre de amor y misericordia. “Así que acerquémonos confiadamente al Trono de la gracia para recibir misericordia y hallar la gracia que nos ayude en el momento que más la necesitemos. Hebreos 4:16
por B. Flores
“Orad sin cesar” (1 Tesalonicenses 5:17).
Sin la oración estaríamos espiritualmente vacíos y sedientos. La oración nos reviste de la gloria de...