Para este Nuevo Año tenemos tantos planes y metas que realizar, tenemos una agenda repleta de ideas, proyectos y deseos que sin la ayuda de Dios verdaderamente nunca los vamos a lograr. No conocemos el futuro pero Dios si lo conoce, si depositamos nuestra confianza en Él y le entregamos todos nuestros sueños a Él, saldremos más que victoriosos. El Señor nos promete y debemos confiar en Sus Promesas, Él está al tanto de nuestro futuro y de nuestras vidas. Él cuida de nosotros y nos desea lo mejor. Si somos creyentes en Jesucristo y en Su palabra, tenemos una esperanza y un futuro de tal manera que invocaremos a Jehová y Él nos escuchará. Hoy te invito a abrazar la Promesa que se encuentra en Jeremías 29:11 donde Dios nos promete aliento y bienestar. El Señor dice así: “Porque Yo Sé muy bien los Planes que tengo para ustedes —afirma el SEÑOR—, Planes de bienestar y no de calamidad, a fin de darles un futuro y una esperanza”.
Empieza ente Nuevo Año con el Señor en todo lo que emprenda a realizar, continúa creyéndole a Dios y a Sus promesas. Ora sin cesar porque los obstáculos los derribamos por medio de la oración.
“Alabado sea Dios, Padre de nuestro Señor Jesucristo, que nos ha bendecido en las regiones Celestiales con toda bendición espiritual en Cristo” (Efesios 1:3).
Señor Jesús, que en este Nuevo Año mis pasos estén dirigidos por Ti. Te entrego mi agenda y mis sueños, dirígeme Tú. Señor guíame a tomar buenas decisiones, bajo tu dirección nunca estaré perdido. Padre Celestial, Dios Eterno, gracias por tu perdón y por el Sacrificio que hiciste por mí. Padre, yo soy una barca, te invito a que sea Tú quien la conduzca a lo largo de este Nuevo Año y siempre, porque sé que bajo Tus alas, llegaré a puertos seguros.
Te amo Señor,
1 de enero 2015
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