Dios nos creó a Su imagen y en Su imagen existe lo alto y no lo bajo. “Porque así dijo el Alto y Sublime, el que habita la eternidad, y cuyo nombre es el Santo: Yo habito en la altura y la santidad, y con el quebrantado y humilde de espíritu, para hacer vivir el espíritu de los humildes, y para vivificar el corazón de los quebrantados” (Isaías 57:15 (RVR1960).
He recibido cartas de hermanos preguntando acerca del significado de “en mis alturas me hace andar”. Creo por fe que este tema tiene que ver con metas que nos vamos a proponer en la vida, pero si no tenemos a Dios en nuestras vidas no vamos a poder ver las bendiciones que Dios tiene detrás de esta promesa donde dice: “Jehová el Señor es mi fortaleza, el cual pondrá mis pies como de ciervas, Y me hará andar sobre mis alturas” (Habacuc 3 Reina Valera (1909). Dios anhela que sus hijos andemos en Su altura, somos cabeza y no cola. En este caminar es necesario andar como Dios anda con un corazón quebrantado y humilde de espíritu.
“En mis alturas me hace andar” significa que no importa en las profundidades o caminos turbulentos en que andes, el Dios Altísimo te dará la salida para que puedas andar. Dios es Todopoderoso, Él es Jehová Nissi, que significa: Jehová es mi bandera. Su poder te sustentará sin resbalar porque el Señor cubrirá y sustentará a Su pueblo. Cuando escale las alturas de la vida, no tendrás temor al bajar ni al subir porque Su Diestra te sustentará. “Me hace andar”, significa que el que me dirige es Dios y no yo. Él es nuestro Pastor que nos guía y dirige nuestras barcas llevándonos a puertos seguros. En ese caminar, también nos elevará alto como el águila sin miedo y sin temor. Amén.
Dios no nos creó para vivir una vida debiluchos, ni mucho menos nos creó para vivir parados sin propósitos. Dios nos estableció para vivir una vida de Propósitos en Él. Nos creó para ser dirigidos por Él, confiar y esperar en Él. “pero los que esperan a Jehová tendrán nuevas fuerzas; levantarán alas como las águilas; correrán, y no se cansarán; caminarán, y no se fatigarán” (Isaías 40:31 (RVR1960).
En las alturas me hace andar significa que Dios desea que tengamos una altura en todas las áreas de nuestras vidas ya sea espiritual, mental y emocional. Que estemos consientes de quien nos dirige es Él y no nosotros. Dios estará con nosotros para ayudarnos a sobrepasar los vientos y las ráfagas de tempestades de la vida. Si Dios le da la sabiduría al águila para protegerse en medio de las tormentas, cuanto más nosotros.
El águila vuela más alto cuando sabe que se va a enfrentar a una tormenta. Ella vuela por encima de la tormenta, hoy Dios nos brinda las armas para saber cómo pelear y vencer los obstáculos. El águila usa esa tormenta para escalar más alto que la tempestad, en otras palabras, los obstáculos no nos podrán vencer en el nombre de Jesús. Aún en las dificultades, Dios hace que todo obre para bien a favor de nosotros. Si Dios lo hiso con los israelitas, Él lo hará otra vez con nosotros. Cuando pasemos por las aguas y las tormentas, Él nos hará andar bien alto para no perecer. Dios tiene cuidado de nosotros.
Sabemos que pasaremos por circunstancias y vicisitudes en esta vida, pero cuando clamamos a Dios y creemos que Él nos guiará, no habrá razón para temer. Dios nunca dejará a Sus hijos tirado en el suelo. Él nos prometió que Nadie podrá hacernos frente en todos los días de nuestras vidas; como estuvo con Moisés, estará con nosotros. El Todopoderoso no nos dejará, ni mucho menos nos desamparará.
“Nadie te podrá hacer frente en todos los días de tu vida; como estuve con Moisés, estaré contigo; no te dejaré, ni te desampararé” (Josué 1:5 (RVR1960). También nos dice: “Cuando pases por las aguas, Yo estaré contigo; y si por los ríos, no te anegarán. Cuando pases por el fuego, no te quemarás, ni la llama arderá en ti” (Isaías 43:2 (RVR1960).
Gracias Dios Altísimo por tu cuidado y gracias por fortalecerme. Gracia Señor por levantarme y
permitir que andes en mis alturas. Recibe toda gloria, honor y honra por siempre. Amén.
Escrito por: Bv. Flores
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