“Mira que te mando que te esfuerces y seas valiente; no temas ni desmayes, porque Jehová tu Dios estará contigo en dondequiera que vayas”. Josué 1:9 (RVR1960)
Estamos viviendo en tiempos decisivos donde los cuales es necesario mantenernos firmes, caminando hacia adelante y sin dar un paso atrás. Es cierto que hay veces que el camino se nos hace duro y dificultoso, pero tenemos un Dios misericordioso. Dios nunca nos pondrá cargas que no podamos cargar.
Estamos viviendo en un tiempo donde el miedo es el protagonista de muchos seres humanos. Bajo ninguna circunstancia el miedo debe apoderarse de un creyente que conoce la Palabra de Dios y Sus promesas. Cuando leemos la Palabra de Dios podemos encontrar muchos temas de aliento de parte del Señor hacia Sus hijos. Nosotros somos hijos de Dios y el miedo no debe ocupar nuestras mentes ni mucho menos el corazón.
Nuestro Padre Celestial nos ama con amor Eterno, Él cuida y guarda de nosotros librándonos del miedo y del temor. El amor y la paz de Dios echa fuera todo temor. “Porque no nos ha dado Dios espíritu de cobardía, sino de poder, de amor y de dominio propio.”
Ahora, si usted no conoce de Dios, no lee Su Palabra y nunca ha tenido un encuentro personal con Él, usted tiene razones de más para temer. Los pensamientos negativos echan raíces en las mentes de un ser humano. Sin embargo, la Palabra de Dios tiene dominio y poder para exterminar todo argumento o imaginaciones negativas de la mente. La Palabra de Dios tiene poder para derribar todo pensamiento negativo que atenta contra la paz mental y espiritual. La Palabra de Dios tiene el poder para cortar de raíz todo pensamiento dañino y devolver una mente renovada.
Dios nos prometió que estaría con nosotros hasta el fin. Quizás te sientes temeroso y con muchas cosas, pero hoy Dios te dice: “No temas, porque Yo estoy contigo; no desmayes, porque Yo Soy tu Dios que te esfuerzo; siempre te ayudaré, siempre te sustentaré con la diestra de mi justicia”.
El que habita al abrigo del Altísimo, vive sin temores. El que pone su confianza en Dios, no temerás el terror nocturno, ni saeta que vuele de día.
Señor en el nombre de Jesús echo fuera todo temor en mi vida. Señor, Tú conoces mi corazón y mis pensamientos, renueva mi mente con Tu Palabra. Hoy corto todo temor en mi vida en el nombre de Jesús.
Salmo 125 (RVR1960) / 2ª Timoteo 1.7/Isaias 41:10 (RVR1960)/ Salmo 91
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