Por B. Flores
“Entrad por Sus puertas con acción de gracias, por Sus atrios con alabanza; Alabadle, bendecid Su Nombre. Porque Jehová es bueno; para siempre es Su misericordia, y Su verdad por todas las generaciones” (Salmos 100:4-5). (Reina-Valera 1960)
El Señor Jesucristo nos hace un llamado. Dentro de Su llamado nos exhorta a que abunde en nosotros agradecimiento y gratitud hacia Él. Dios tiene muchas puertas abiertas para sus hijos, el problema es si nosotros estamos decididos completamente a entrar con acción de gracias y con un espíritu arrepentido y agradecido. ¿Cómo quiere Dios que Sus hijos entren en Su puerta?
Está muy claro: con acción de gracias, con alabanzas, alabándole y bendiciendo Su nombre porque Él es bueno y tiene misericordia con cada uno de nosotros. Muchas veces sin pensar y aflijidos, entramos a Sus puestas cargados con muchos problemas para decírselo al Señor como si Él no lo supiera. La palabra es clara, el Señor desea que sus hijos entren a Sus atrios, no con problemas, sino con acción de gracias. El Señor está a la puerta, Él solo demanda de nosotros que entremos con alabanzas, con santidad, en oración, arrepentidos y con un corazón contrito y humillado porque es ahí, que Él derrama Sus bendiciones, es precisamente en ese momento donde Él abre puertas y nadie las puede cerrar.
“Así dice Jehová a su ungido, a Ciro, al cual tomé Yo por su mano derecha para sujetar naciones delante de él y desatar lomos de reyes; para abrir puertas delante de él, puertas que no se cerrarán: Yo iré delante de ti, y enderezaré los lugares torcidos; quebrantaré puertas de bronce, y cerrojos de hierro haré pedazos; Isaías 45:1-2.
El momento de buscar la presencia de Dios, es un momento especial, no es para hablar de negocios o para hablar negativamente del hermano. El momento de entrar en Sus puertas es para adorarle y bendecir Su nombre con un corazón sencillo y humilde antes Su Trono Celestial.
¿Cómo bebo darle gracias al Señor? Hay muchas razones para darle las gracias al Señor:
1. Agradecidos por el sacrificio que Él hizo por todos nosotros, no porque lo merezcamos, sino por Su misericordia y porque Él es bueno.
2. Agradecidos por nuestra salvación, pues nos escogió desde el principio para salvación mediante la santificación por el Espíritu y la fe en verdad. 2 Tesalonicenses.
3. Porque nos hizo aptos para participar de la herencia de los santos. Colosenses 1:12
4. Por todo lo que Él ha hecho y hará en nuestras vidas.
5. Por librarnos del poder de la muerte y la esclavitud.
6. Por sanarnos y restaurarnos.
7. Por transformarnos de una piedra fea a una joya preciosa.
8. Por escuchar nuestras peticiones cuando a Ti clamo. A ti, oh Dios de mis padres, te doy gracias y te alabo, porque me has dado sabiduría y fuerza, y ahora me has revelado lo que te pedimos; pues nos has dado a conocer el asunto del rey. Daniel 2:23
9. Por gozar del privilegio de los dones del Espíritu Santo y dejar que solo Él nos dirija.
10. Por nuestras familias y por la promesa que Dios nos ha dado: “Mi casa y yo le serviremos a Jehová” (Josué 24:15). Mi casa, casa de oración será llamada”. Mateo 21:13
11. Primeramente doy gracias a mi Dios mediante Jesucristo con respecto a todos vosotros, de que vuestra fe se divulga por todo el mundo. Romanos 1:8
12. Un día andábamos ciegos, sin rumbo y sin dirección, perdidos en la oscuridad; pero por la gracia de nuestro Dios, cambió nuestros corazones sacándonos de las tinieblas hacia Su Luz. Brindándonos Su amor y revistiéndonos de Su fe. Antes andábamos incrédulos y renuentes a Su palabra, pero un día llegó el Señor a nuestros corazones y nos sacó de la ignorancia a Su entendimiento por medio de Jesucristo y por el poder de Su Espíritu Santo. Debemos siempre dar gracias a Dios por vosotros, hermanos, como es digno, por cuanto vuestra fe va creciendo, y el amor de todos y cada uno de vosotros abunda para con los demás. 2 Tesalonicenses 1:3
Entrad por Sus puertas con gozo. Orad sin cesar. Dad gracias en todo, porque esta es la voluntad de Dios para con vosotros en Cristo Jesús. 1 Tesalonicenses 5:16-18 Reina-Valera 1960
Escrito el 4 de Noviembre de 2013
Escrito originalmente para www.ministeriosdesanidad.org