Jesús Siempre Llega a Tiempo parte 2
Estaba enfermo cierto hombre llamado Lázaro, de Betania, la aldea de María y de su hermana Marta. María, cuyo hermano Lázaro estaba enfermo, fue la que ungió al Señor con perfume y le secó los pies con sus cabellos. Las hermanas entonces mandaron a decir a Jesús: “Señor, el que Tú amas está enfermo” (Juan 11:1-3).
Hermanos, cuando leemos y meditamos en la Palabras de Dios, podemos notar que muchos hijos de Dios tambien pasaron por situaciones difíciles y el Señor llegó a tiempo a socorrerlos. Dios es el mismo de ayer y de hoy. No sé qué los doctores te han dicho, no sé cuál es el reporte, pero sí sé que el último reporte lo ofrece el Señor, el que todo lo sabe. El mismo Dios que levantó a Lázaro te levanta a ti en este día. Solo cree y verás el poder sobrenatural de Dios derramado en tu vida y en tu familia. Una cosa sé y la confirmo: Dios es real, tan real como tambien son Sus Palabras. Llénate de Su palabra, no dudes más y cree por fe: Recibe sanidad en el nombre de Jesús.
Marta y María pensaban que Dios se había olvidado de ellas, ellas pensaron que Él había llegado tarde, ese acontecimiento tenía que pasar de esa manera para que los hombres vieran la gloria de Dios. Dios mostro Su gloria y todos lo vieron y dieron testimonio. La manera en que Dios planeó las cosas, reflejó que no estaba al tanto de lo que le pasaba a Lázaro pues cuando Jesús supo la noticia les dijo a Sus discípulos: “Nuestro amigo Lázaro duerme; mas Voy para despertarle” (Juan 11:1-25) (RVR1960).
“Entonces Marta, cuando oyó que Jesús venía, salió a encontrarle; pero María se quedó en casa. Y Marta dijo a Jesús: Señor, si hubieses estado aquí, mi hermano no habría muerto. Mas también sé ahora que todo lo que pidas a Dios, Dios te lo dará. Jesús le dijo: Tu hermano resucitará. Marta le dijo: Yo sé que resucitará en la resurrección, en el día postrero. Le dijo Jesús: Yo Soy la Resurrección y la Vida; el que cree en Mí, aunque esté muerto, vivirá. Y todo aquel que vive y cree en Mí, no morirá eternamente. ¿Crees esto? Le dijo: Sí, Señor; yo he creído que Tú eres el Cristo, el Hijo de Dios, que has venido al mundo. (Juan 11:20-27) (RVR1960).
Marta porque creyó recibió su milagro. Cuando llega el Señor suceden cosas maravillosas porque “María, cuando llegó a donde estaba Jesús, al verle, se postró a sus pies, diciéndole: Señor, si hubieses estado aquí, no habría muerto mi hermano. Jesús entonces, al verla llorando, y a los judíos que la acompañaban, también llorando, se estremeció en espíritu y se conmovió, y dijo: ¿Dónde le pusisteis? Le dijeron: Señor, ven y ve. Jesús lloró. Dijeron entonces los judíos: Mirad cómo le amaba. Y algunos de ellos dijeron: ¿No podía éste, que abrió los ojos al ciego, haber hecho también que Lázaro no muriera? Jesús, profundamente conmovido otra vez, vino al sepulcro. Era una cueva, y tenía una piedra puesta encima. Dijo Jesús: Quitad la piedra. Marta, la hermana del que había muerto, le dijo: Señor, hiede ya, porque es de cuatro días.
• Es curioso que en momentos así, siempre en el grupo de gentes nos vamos a encontrar con personas incrédulas y pendencieras que solo van a estar para averiguar y formular sus propias conclusiones. Es por eso que en sus vidas no suceden milagros por su poca fe. “Y algunos de ellos dijeron: ¿No podía éste, que abrió los ojos al ciego, haber hecho también que Lázaro no muriera? El señor ya sabía lo que iba a acontecer en esa reunión como tambien tenía el conocimiento de la incredulidad de algunos que estaban presente.
Jesús le dijo: ¿No te he dicho que si crees, verás la gloria de Dios?
Entonces quitaron la piedra de donde había sido puesto el muerto. Y Jesús, alzando los ojos a lo alto, dijo: Padre, gracias te doy por haberme oído. Yo sabía que siempre me oyes; pero lo dije por causa de la multitud que está alrededor, para que crean que Tú me has enviado. Y habiendo dicho esto, clamó a gran voz: !!Lázaro, ven fuera! Y el que había muerto salió, atadas las manos y los pies con vendas, y el rostro envuelto en un sudario. Jesús les dijo: Desatadle, y dejadle ir. Entonces muchos de los judíos que habían venido para acompañar a María, y vieron lo que hizo Jesús, creyeron en Él” (Juan 11:32-45).
Para el que cree todo es posible, si dudas, no ocurrirá nada. El Señor siempre llega a tiempo, Jesús siempre llega a tiempo para remover la piedra, Él llega a tiempo para desatar toda cadena de enfermedad. Jesús nunca se demora, y cuando eso sucede es para mostrar Su gloria y Su poder como lo hizo con Marta y María y todos los que presenciaron la gloria y el poder de Dios. El Señor, el Todopoderoso, el que resuelve tus problemas y sana todas tus enfermedades nunca llega tarde. Así como Jesús levantó a Lázaro, te levanta hoy, para Dios no hay nada imposible. Nunca olvide que Dios es Omnisciente y Omnipresente, la Omnisciencia y la Omnipresencia de Dios significa, que Él conoce nuestro levantar y nuestro acostar como tambien ve y conoce todo de nosotros. Él controla el tiempo y llega exactamente en el momento en que más lo necesitamos, Jesús nunca llega tarde y si así ocurre, es para mostrar Su Gloria y Su Poder Sobrenatural.
Gracias padre Eterno por tu amor y por tu gracia, gracias porque en momentos difíciles de mi vida, Tú siempre ha llegado a tiempo. “Oh Jehová, Tú me has examinado y conocido. Tú has conocido mi sentarme y mi levantarme; Has entendido desde lejos mis pensamientos. Has escudriñado mi andar y mi reposo, y todos mis caminos te son conocidos. Pues aún no está la palabra en mi lengua, y he aquí, oh Jehová, Tú la sabes toda” ¿A dónde me iré de tu Espíritu? ¿Y a dónde huiré de tu presencia? (Salmos 139) (RVR1960).
El Señor te dice: “No me he olvidado de ti”.
por Bv. Flores
www.ministeriosdesanidad.org