Bennie Flores
Mis ovejas oyen Mi Voz, y Yo las conozco, y me siguen, y Yo les doy Vida Eterna; y no perecerán… Juan 10:27
” Jehová es mi pastor; nada me faltará. En lugares de delicados pastos me hará descansar; Junto a aguas de reposo me pastoreará. Confortará mi alma; Me guiará por sendas de justicia por amor de Su nombre. Aunque ande en valle de sombra de muerte, No temeré mal alguno, porque Tú estarás conmigo; Tu vara y tu cayado me infundirán aliento. Aderezas mesa delante de mí en presencia de mis angustiadores; Unges mi cabeza con aceite; mi copa está rebosando. Ciertamente el bien y la misericordia me seguirán todos los días de mi vida, Y en la casa de Jehová moraré por largos días.” Salmos 23:1-6
“Porque así ha dicho Jehová el Señor: He aquí Yo, Yo mismo iré a buscar mis ovejas, y las reconoceré. Como reconoce su rebaño el pastor el día que está en medio de sus ovejas esparcidas, así reconoceré mis ovejas, y las libraré de todos los lugares en que fueron esparcidas el día del nublado y de la oscuridad.” Ezequiel 34:11-12
“Y sabrán que Yo Jehová su Dios estoy con ellos, y ellos son mi pueblo, la casa de Israel, dice Jehová el Señor. Y vosotras, ovejas mías, ovejas de mi pasto, hombres sois, y Yo vuestro Dios, dice Jehová el Señor” (Ezequiel 34:30-31).
“Oíd palabra de Jehová, oh naciones, y hacedlo saber en las costas que están lejos, y decid: El que esparció a Israel lo reunirá y guardará, como el pastor a su rebaño” (Jeremías 31:10).
“Reconoced que Jehová es Dios; Él nos hizo, y no nosotros a nosotros mismos; Pueblo Suyo somos, y ovejas de Su prado” (Salmos 100:3).
“Venid, adoremos y postrémonos; Arrodillémonos delante de Jehová nuestro Hacedor. Porque Él es nuestro Dios; Nosotros el pueblo de Su prado, y ovejas de Su mano. Si oyereis hoy Su voz, No endurezcáis vuestro corazón, como en Meriba, Como en el día de Masah en el desierto,” (Salmos 95:6-8).
Es curioso que nos vamos a encontrar con personas que conocen la palabra desde Génesis hasta Apocalipsis, todo lo saben, pero sus corazones no alcanzan a comprender el amor de nuestro Señor Jesucristo. Son rápido a condenar y a echar fuera a sus ovejas, especialmente cuando esta se encuentra extraviada o no ha cumplido las normas de ellos. No le dan lugar para apacentar la oveja perdida, y solo hay condenación en sus palabras…
Escúchame Ahora: El Señor es mi Pastor, el Señor es tu Pastor, Él siempre está interesado en ti aun cuando estés extraviada, confundida o desechada. El Señor te está esperando, solo Créele a Él y verás que Él nunca te rechazará si decides dejarte guiar por Él. Dios te guiará por la mejor dirección para que tus pasos nunca se desvíen. Te aseguro que bajo la dirección de Dios tú nunca andarás perdido. El Señor Jesucristo, te cambiará a una oveja hermosa, sin mancha y sin arrugas.
Tengo muy buena noticia para ti, El Señor también por Su misericordia tiene pastos para aquellas ovejas que andan extraviadas y perdidas, Su gran amor es tan grande que también tiene acceso para las ovejas rebeldes, en otras palabras, El Señor Jesucristo tiene vereda para ti, Él no te rechaza. “También tengo otras ovejas que no son de este redil; aquéllas también debo traer, y oirán mi voz; y habrá un rebaño, y un Pastor” (Juan 10:16). Su FIDELIDAD ES GRANDE!!!
“De modo que si alguno está en Cristo, nueva criatura es: las cosas viejas pasaron; he aquí todas son hechas nuevas” 2 Corintios 5:17
“Porque vosotros erais como ovejas descarriadas, pero ahora habéis vuelto al Pastor y Obispo de vuestras almas” (1 Pedro 2:25) Porque el Cordero que está en medio del trono los Pastoreará, y los Guiará a Fuentes de Aguas de Vida; y Dios Enjugará toda Lágrima de los Ojos de Ellos” (Apocalipsis 7:17). Volvió, pues, Jesús a decirles: De cierto, de cierto os digo: Yo Soy la Puerta de las Ovejas” (Juan 10:7).
Podemos notar cómo Dios trata a Sus ovejas con amor y ternura. “He aquí que Jehová el Señor vendrá con poder, y su brazo señoreará; he aquí que su recompensa viene con Él, y Su paga delante de su rostro. Como Pastor apacentará su rebaño; en Su brazo llevará los corderos, y en Su seno los llevará; pastoreará Suavemente a las recién paridas.” (Isaías 40:10-11)
‘Yo Soy el buen Pastor; el buen Pastor su Vida da por las Ovejas. “No tendrán hambre ni sed, ni el calor ni el sol los afligirá; porque el que tiene de ellos misericordia los guiará, y los conducirá a manantiales de aguas” (Isaías 49:10). “El Cordero que está en medio del trono los pastoreará, y los guiará a fuentes de aguas de vida.” “mas el que bebiere del agua que Yo le daré, no tendrá sed jamás; sino que el agua que Yo le daré será en él una fuente de agua que salte para vida eterna” (Juan 4:14)
“Jehová te pastoreará siempre, y en las sequías saciará tu alma, y dará vigor a tus huesos; y serás como huerto de riego, y como manantial de aguas, cuyas aguas nunca faltan” (Isaías 58:11)
“Y me dijo: Hecho está. Yo Soy el Alfa y la Omega, el Principio y el Fin. Al que tuviere sed, Yo le daré gratuitamente de la fuente del agua de la vida” (Apocalipsis 21:6)
“Y el Espíritu y la Esposa dicen: Ven. Y el que oye, diga: Ven. Y el que tiene sed, venga; y el que quiera, tome del agua de la vida gratuitamente” (Apocalipsis 22:17).
“El que teme al Señor hace todo esto y el que se aferra a la Ley logrará la sabiduría. (Eclesiástico 15:1-3).
Señor en este momento te doy gracias por tu misericordia y por tu gran amor incondicional, tu amor Ágape, que nunca cambia. Hoy solo vengo a ti con todas mis imperfecciones, vengo a vaciarme de todo el peso que me aflige y te lo entrego a ti con un corazón dispuesto a seguir Tus pasos. Gracias por ser mi Pastor que me guía por buenas direcciones, bajo tu dirección sé que nunca estaré perdida. Gracias por recogerme cuando me he sentido rechazada, enséñame a caminar cada día agradable a ti. Escudriña mi corazón cada día para no pecar contra ti. Me aferro a tus mandamientos para obtener de tu sabiduría. Señor Jesucristo, gracias por tu palabra, ella es la Fuente que sacia mi sed. Gracias Señor. Gracias Padre por mi Salvación, la atesoro y la abrazo cada día. Señor yo sé que Tú tiene grandes bendiciones para mi vida. Amén.
Escrito el 30 de abril 2014
