La violencia contra la mujer dominicana es un fenómeno que se ha levantado ferozmente en la sociedad y está afectando el núcleo familiar.

Actualmente, existe un alto número de mujeres que son víctimas de atropello y abusos en la sociedad dominicana. El ciclo de violencia se lleva a cabo tanto en el seno de la familia como también fuera del hogar.

¿Qué es una violencia de género?
Es el acto violento basados en un entorno de contrariedad en el marco de un sistema de relaciones de superioridad de los hombres sobre las mujeres. Es el resultado de un círculo machista que atribuye un sinnúmero de conductas de prepotencia, control o abuso de fuerza de los hombres sobre las mujeres. Este círculo tiene como consecuencia daños físico, mental y mortal. Esta epidemia que está cobrando las vidas a muchas mujeres, tiene que parar.

Las autoridades respaldan a las mujeres de sus agresores, el problema es que muchas mujeres se ven obligadas a aguantan y continúan en silencio. Muchas veces las mujeres aguantan y toleran por estar en un círculo vicioso económico dependiente de un hombre. Los hijos ven ese patrón desde muy niños y lamentablemente, ellos aprenden que la violencia se tolera. Esa imagen de ver a papá maltratando a mamá se queda incrustada en la mente del niño, es ahí donde ese patrón de conducta y lapsos se va desarrollando en violencia.

Como mujer sabia, tenemos que preservar y cuidar nuestros hogares de todo tipo de violencia y no darle lugar a ese flagelo. Las madres, y los padres deben de enseñarles a los hijos el amor familiar y el respecto a la mujer.

Mujeres tenemos que alzar nuestra voz, tenemos que denunciar al agresor y llamar a las autoridades. Hay mucho dolor, mucho miedo y mucho abuso, pero basta ya del atropello, somos las madres las que damos a luz, somos las que traemos a los seres humanos al mundo por ende hay que respetarnos y tratarnos como vasos frágiles. Armémonos de valentía y digamos no a la violencia de genero. Basta ya del abuso y el maltrato.

Vosotros, maridos, igualmente, vivid con ellas sabiamente, dando honor a la mujer como a vaso más frágil, y como a coherederas de la gracia de la vida, para que vuestras oraciones no tengan estorbo.” (1 Pedro 3:7)

“El SEÑOR es el pronto auxilio de los oprimidos; Él es su Baluarte en momentos de angustia y desesperación.

Mujer, hoy vengo a recordarte que eres perla preciosa para Dios, eres cabeza y no cola. Eres la niña de los ojos del Señor. Dios te creó y te formó porque eres muy especial para Él. Mujer, tú eres altamente estimada y valorada por Dios. Mujer, tú no estás huérfanas, tú tiene un Padre que te defiende y pelea por ti; Jehová de los Ejércitos, es Su Nombre. Aunque tu padre, tu madre y tu esposo te dejaran, con todo, Jehová te recogerá. Tú no estás sola. Vamos… Levántate!

Oremos:

Padre Eterno, Dios Todopoderoso, Tú conoce lo que se oculta detrás de cada situación. Te pedimos por todos nosotros, hombres y mujeres para que podamos vivir una vida llena de sabiduría, armonía y paz. Señor, te pedimos que el hombre pueda valorar, y cuidar a la mujer y mirarla y tratarla como vaso frágil.
Padre, en el nombre de Jesús, te pedimos por la mujer que se encuentra entre la espada y la pared y no encuentra un refugio para protegerse del maltrato. Te pedimos por cada mujer para que sea valorada y tratada como vaso muy frágil en las manos de su esposo. Te pido por aquellas mujeres que han sido maltratadas y usadas como objeto despreciado.
Padre Eterno, Tú eres el Baluarte en momentos de angustia y desesperación. Te pedimos que sane la República Dominicana de todo espíritu de maldad de violencia y asesinatos en contra de la mujer dominicana. Clamo protección, restauración y vida a cada mujer, en el nombre de Jesús. Amén.

www.ministeriosdesanidad.org


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  1. “Mas tú, Jehová, eres escudo alrededor de mí; mi gloria, y el que levanta mi cabeza. Con mi voz clamé a Jehová, y él me respondió desde su monte santo. Yo me acosté y dormí, y desperté, porque Jehová me sustentaba. No temeré a diez millares de gente, que pusieren sitio contra mí.” Salmo 3:3-6

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