“Y Mi pueblo será saciado de Mi bien, dice Jehová” (Jeremías 31:14).
Vivimos en un mundo que por más bienes que tengan algunas personas, más riquezas quieren, “porque los que quieren enriquecerse caen en tentación y lazo, y en muchas codicias necias y dañosas, que hunden a los hombres en destrucción y perdición; porque raíz de todos los males es el amor al dinero, el cual codiciando algunos, se extraviaron de la fe, y fueron traspasados de muchos dolores” (1 Timothy 6:9).
No estoy diciendo que el dinero es malo, al contrario, el Señor nuestro Dios, nos provee lo necesario para que Su pueblo sea saciado de Su bien; el problema es cuando la persona ama el dinero y no se sacia, siempre quiere más y más. Penosamente vemos personas importantes que se enriquecieron con sus talentos, pero las riquezas, el poder y el amor al dinero, les cambiaron sus principios, valores y hasta sus identidades.
Una cosa he visto y es que, el rico no se sacia de dinero, siempre quiere más, en cambio, Dios promete que Su pueblo será saciado por medio de Él. Dios nos promete saciarnos con Su superabundancia de Sus bienes y esto no es solamente con dinero, más bien, saturarnos con todas nuestras necesidades incluyendo sanidad.
Dios es el Dador de Su pueblo, Él es nuestro Proveedor y lo que Él cumple lo establece en abundancia. “Y dijo Moisés: El SEÑOR os dará a la tarde carne para comer, y a la mañana pan hasta saciaros” (Éxodo 16:8).
Por más escasez o carencia que haya en un panorama seco y carente de alimentos y un sinfín de necesidades, Dios nunca dejará desamparado a Su pueblo, Él prometió que Su pueblo será saciado de Su bien. Las personas que son saciadas por Dios nunca andan con carencias, ni mucho menos, mendingando, ni haciendo cosas indebidas para obtener dinero, porque Dios es la Fuente de su provisión. Dios es la Porción de Su pueblo. Dios es tu porción: ¿Lo crees? Jehová es mi porción, y yo lo creo en el Nombre de Jesús.
Oración:
Gracias Padre Eterno por tu porción y por tus bendiciones que son nuevas cada mañana. Te pido que sea Tú la porción de todo aquel que esta leyendo este mensaje, provéele cada una de sus necesidades, en el Nombre de Jesús te lo pido. Amén.
Mensaje de Dios www.ministeriosdesanidad.com
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