Olvido lo que queda atrás y me enfoco a lo que está delante
La persona que se esmera persevera a pesar de cualquier adversidad; sigue persistiendo hasta lograr su objetivo. Los obstáculos no la detienen por mas fuertes que sean los vientos, continúa caminando, persistiendo; y dando el máximo. Si ve que la carga es fuerte y pesada para cargar, se detiene, descansa para luego levantarse con más fuerzas y así, continuar la faena que decidió proponerse. Una persona con Propósitos nunca deja nada a la mitad y nunca se para en medio de la carrera, mas bien, llega a la meta con la cabeza en alto. Una persona con propósitos pone a Dios primero en todo lo que se emprende a realizar en la vida. Hebreos 10:39 nos dice la Palabra de Dios que, “…nosotros no somos de los que retroceden para perdición, sino de los que tienen fe para preservación del alma.
En medio de su carrera, el apóstol Pablo nos dice: Hermanos, yo mismo no pretendo haberlo ya alcanzado; pero una cosa hago: olvidando ciertamente lo que queda atrás, y extendiéndome a lo que está delante, prosigo a la meta, al premio del supremo llamamiento de Dios en Cristo Jesús” (Filipenses 3:13-14).
¿Qué es lo que te detiene a continuar? Tal vez el pasado fue fuerte y lloraste mucho de tal modo que, todavía en el presente has decidido no continuar. El apóstol Pablo nos dice, “pero una cosa hago: olvidando ciertamente lo que queda atrás, y extendiéndome a lo que está delante, prosigo a la meta, al premio del supremo llamamiento de Dios en Cristo Jesús. El pasado del dolor solamente trae recuerdos dolorosos que solamente brindan estancamientos, pobreza y depresión.
Entrégale a Dios todo dolor y descansa en Él. Busca a Dios, busca Su Rostro, porque Él te escucha. No dejes que las tormentas y adversidades detengan los Propósitos de Dios para tu vida. No dejes que los problemas y adversidades de la vida detengan el Plan que Dios ha preparado para ti. Ora y busca de Dios porque al hacerlo, las adversidades y los problemas se detendrán y tú marchará hacia adelante victorioso.
Dios nos brinda la fuerza y esperanza de continuar. No te rindas ni mucho menos cuelgues los guantes, pelea; hasta lograr lo que te has propuesto. Con la ayuda de Dios, tú puedes lograr llegar a realizar lo que Él te has puesto en tu corazón. “Mira que te mando que te esfuerces y seas valiente; no temas ni desmayes, porque Jehová tu Dios estará contigo en dondequiera que vayas” (Josué 1:9).
Yo nunca me he rendido ni mucho menos retrocederé en medio de la carrera, de igual manera tú tampoco. Cuando sientas que no tengas fuerzas, pídele las fuerzas a Dios; porque Él te la dará. Cuando vea que la carrera es larga y no tengas ánimo ni motivación para correrla, llénate de la Palabra de Dios y cántale alabanzas al Señor; te aseguro que Dios te fortalecerá y te llenará de Su paz. Tú no eres cualquier cosa, eres altamente estimado por Dios; eres cabeza y no cola. Él te ama y Su anhelo es prosperarte en todos tus caminos. Es cierto que estamos viviendo en tiempos extremadamente difícil, pero Dios irá delante de ti para guardarte y agarrarte con el hueco de Su Mano poderosa. En la Mano de Dios somos más que vencedores.
Oración:
Gracias Padre Eterno por renovar mis fuerzas cada día. Confío en tus promesas y me agarro a ellas. Gracias por el propósito que tienes para mi vida y mi familia. Señor, sin ti nada puedo realizar. Te pido que me dirija cada día, renueva mi mente y guarda mi corazón para no pecar contra ti. Padre Eterno, Dios Todopoderoso, te pido perdón porque en momentos difíciles pensé retroceder, pero tu gracias me has levantado, me ha enfocado; y me has sostenido. Jehová de los Ejércitos, gracias porque hasta aquí Tú me has traído, me has guardado, me has perdonado; y me has bendecido. Gracias por fortalecerme a tiempo y fuera de tiempo, en el Nombre que es sobre todo nombre, en el Nombre de Jesús; te doy gracias. Amén.
Dios te bendiga, Dios te guarde y conceda las peticiones de tu corazón de acuerdo con Su Propósito para tu vida.
Mensaje de Dios
Escrito por Bv. Flores
